Google ha ganado un caso judicial importante contra un grupo que ha operado una red de bots para manipular sus sistemas, lo que podría tener implicaciones significativas para futuros casos de ciberdelincuencia.
El caso se relaciona con un grupo con sede en Rusia llamado Glupteba, que usó exploits de bots para infiltrarse en millones de personas. Dispositivos Windows.
El sistema Glupteba robó credenciales de usuario y cookies, extrajo criptomonedas en hosts infectados e implementó componentes de proxy dirigidos a sistemas Windows y dispositivos IoT. El malware se distribuía principalmente mediante dudosos enlaces de descarga pirateados.
Tales casos son difíciles de escuchar, principalmente porque los perpetradores viven en el extranjero y, por lo tanto, están fuera de la jurisdicción de la ley estadounidense, pero en este caso el tribunal falló a favor de Google:
«El tribunal accedió a la solicitud de sanciones de Google, pero fue más allá y multó tanto a los acusados en Rusia como a su abogado en los Estados Unidos, y ordenó a los actores criminales detrás de Glupteba que pagaran los honorarios legales de Google para contar».
Un elemento clave en este caso fue el nombramiento de las personas y empresas ficticias involucradas en el juicio de Glupteba, exponiendo así a estos grupos específicamente al crimen. Esto facilitó el litigio directo, mientras que la acción adicional para responsabilizar al abogado del grupo en los Estados Unidos agrega aún más impulso a la decisión final.
Es un fallo importante que podría disuadir a los delincuentes de participar en tales actividades. Ser capaz de responsabilizar a los grupos extranjeros de manera más directa proporcionaría una nueva capa de recursos legales, lo que permitiría tomar muchas más medidas contra tales operaciones con el tiempo.
Por supuesto, algunos grupos seguirán siendo entidades sin rostro. Pero las operaciones más grandes requieren financiación, y si Google y otras plataformas pueden vincularse a estas fuentes, se podrían imponer sanciones adicionales que aumentarán la presión sobre esas operaciones.
Será interesante ver si el grupo Glupteba apelará el veredicto y lo que sigue. Pero podría sentar un importante precedente que ayudará a combatir el fraude en línea.